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FIRAVI 2003. Un encuentro internacional de la
vitivinicultura con regusto sensorial
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Los días 3, 4 y 5 de abril
tuvo lugar en Vilafranca del Penedès la decimocuarta Feria Técnica de la Viña,
el Vino y el Cava, FIRAVI 2003. El encuentro dirigió
sus actividades a los diversos ámbitos del sector vitivinícola, entre ellos la
viticultura, la gastronomía, la enología y los sentidos.
Paralelamente a las
actividades propias de la feria, tuvieron lugar unas jornadas técnicas de
carácter internacional, cuya temática cubrió ámbitos relacionados con nutrición
y salud, calidad, las perspectivas futuras del sector, modelos de viticultura,
aspectos organolépticos y de análisis sensorial de vinos, creación de nuevas
variedades y soluciones prácticas a problemas enológicos. Cabe destacar el
elevado nivel científico de las jornadas, con la presencia de valorados
expertos de la escena nacional e internacional. Entre ellos podemos citar al
profesor Michel Moutounet, de l’INRA de Montpellier (entrevista en acenologia.com), la Dra.
M. Luz Rodríguez, de la Escuela de Ingenieros Industriales de Valladolid; el
Dr. Alain Bouquet, también investigador del INRA francés o el profesor Kobus
Low, del ARC Infruitec-Nietvoorbij sudafricano.
Una de las conferencias que despertó
mayor interés fue la impartida por la Dra. Rodríguez Méndez, cuya investigación
se desarrolla en el grupo de Sensores
de la Universidad de Valladolid, diseñando
narices y lenguas electrónicas. Su intervención, con el título «Sistemas
electrónicos para la caracterización organoléptica de vinos», repasó varios
aspectos conceptuales y prácticos de la evaluación sensorial por panel de expertos
y del análisis químico tradicional, frente a las ventajas que ofrecen los
nuevos métodos, representados por las narices y las lenguas electrónicas. Las
características de los distintos tipos de sensores que constituyen las estos
sentidos artificiales, de tipo orgánico o inorgánico (en su grupo trabajan
principalmente con ftalocianinas), su aspecto, su selectividad de respuesta y
los programas de reconocimiento fueron parte importante de esta presentación,
aunque lo que más captó la atención de los asistentes fueron las aplicaciones
de estos sistemas a la enología y los resultados de «catas electrónicas» de
vinos monovarietales. Y, para finalizar, algo de ciencia ficción que tal vez
forme parte de un futuro no tan lejano: el panel electrónico. Narices, lenguas
y ojos electrónicos al servicio del análisis sensorial. Las primeras pruebas de
este grupo de investigadores sobre seis vinos tempranillo (tres DOC Rioja y
tres DO Ribera del Duero) son esperanzadores. La ponencia terminó con un
mensaje para los actuales evaluadores: siempre serán necesarios expertos para
programar y entrenar los sistemas artificiales.
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[29.04.03]
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